Un cambio en las expectativas de los empleados y una rápida transformación de la tecnología están remodelando las formas de trabajar de las empresas. Debes de conocer todas las tendencias del futuro del trabajo para planificarlo.
En los últimos tres años, se han producido grandes transformaciones en el mundo del trabajo. Y es posible que estos cambios sean para siempre.
La gran lección de la pandemia fue que cómo trabajamos es mucho más importante que dónde trabajamos. Así, el trabajo remoto e híbrido se convirtió en norma para muchas organizaciones.
Además, las empresas están analizando muchos aspectos de sus prácticas de trabajo. De una u otra forma, buscan ofrecer flexibilidad, están cambiando la forma de planificar y distribuir el trabajo y, también, están reduciendo o reinventando el espacio de sus oficinas.
Por otra parte, los avances tecnológicos, como el metaverso, la inteligencia artificial, y la realidad virtual y la aumentada, están generando cambios en los puestos de trabajo, las tareas y las competencias. La revolución digital está transformando a todos los sectores.
Muchas tendencias clave ya están moldeando el futuro del trabajo. Workplace, una plataforma empresarial todo en uno de Meta, profundiza en las 11 tendencias más importantes. Es importante que una organización las conozca para saber cómo afrontarlas.
- TRABAJO HÍBRIDO
Una tendencia muy importante que surgió después de la pandemia fue el trabajo híbrido. Ahora, los empleados tienen la opción de trabajar completamente en la oficina, de forma remota o una combinación flexible.
Esta modalidad implica un significativo cambio en el funcionamiento de las organizaciones, ya que los empresarios se centran en mantener la productividad, adaptar la cultura de la empresa y encontrar nuevas formas de trabajar de forma conjunta e individual. Pero el trabajo híbrido tiene tanto ventajas como desventajas, así que hay que analizar ambas a conciencia.
2. AUTOMATIZACIÓN
La firma McKinsey sostiene que la automatización afectará a casi todos los puestos de trabajo y, como resultado, cambiará la forma en que las empresas operan en casi todos los sectores. De hecho, el rápido auge de las tecnologías robóticas y de la inteligencia artificial ya ha reducido las tareas repetitivas, impulsando la eficacia operativa, la productividad y ahorrando costos.
Aunque la automatización podría reemplazar a millones de empleos, los temores a que las máquinas tomen el control son mal infundados. Se ha visto que los mercados laborales se adaptan a los avances tecnológicos, y que la pérdida de puestos de trabajo puede compensarse con la creación de otros nuevos.
- EL METAVERSO
Las tecnologías de realidad virtual, realidad aumentada y hologramas transformarán la forma en que trabaja la gente, creando espacios que reúnen a empleados in situ, remotos, de primera línea e híbridos, dando lugar a lo que Mark Zuckerberg, Director Ejecutivo de Meta, llama la “oficina infinita”. Igualmente, la tecnología revolucionará la mentoría y la capacitación.
- CENTRARSE EN LA EXPERIENCIA DE LOS EMPLEADOS
La organización buscará centrarse en brindar una experiencia positiva a los empleados. Este es un proceso integrado en el que participan el lugar de trabajo, las tecnologías de la información, los recursos humanos, y los líderes y gerentes.
Por ejemplo, para tener concentrados e impulsar la productividad de los equipos remotos e híbridos, los empleados necesitan una experiencia digital eficaz, combinando adecuadamente equipos y software que los mantenga productivos y comprometidos. Para llegar a ello, la empresa debe encontrar e implementar herramientas valiosas, y desechar las que frenan a los trabajadores o los sobrecargan.
- FLEXIBILIDAD EN LOS ROLES Y LOS PROCESOS
Hoy en día, un factor clave para que el empleado acepte o deje un trabajo es la flexibilidad. El trabajo remoto o híbrido es una modalidad de flexibilidad, pero también lo son horarios definidos por los empleados, horarios graduales de entrada y de salida, prolongar el tiempo libre para los descansos o más opciones de tiempo libre remunerado.
Para ser flexibles, las organizaciones deben reevaluar sus tareas y procesos, para decidir cuáles pueden realizarse eficazmente cuando las personas están dentro o fuera de la oficina.
- ENFOCARSE EN LA SALUD Y EL BIENESTAR
Al concentrarse en la experiencia de los empleados, las organizaciones buscan formas de mejorar su salud y su bienestar en el lugar de trabajo. Esto se relaciona con el nuevo enfoque de lograr un mejor equilibrio entre la vida laboral y la privada.
Por lo anterior, hay empresas que están agregando beneficios para la salud en los paquetes de empleo e invierten en las siguientes áreas: carrera profesional y propósito, social, financiera, salud, bienestar mental, y bienestar emocional.
- CONTRATACIÓN BASADA EN COMPETENCIA Y NO EN ROLES
Los empleadores están percibiendo que la jerarquía tradicional basada en roles, anterior a la pandemia, ya no es adecuada para el trabajo del futuro. Hoy, contratan y forman competencias que posibilitan la expansión empresarial y el desarrollo profesional. También reconocen que las capacidades de las personas son más importantes que los trabajos que hacen o el cargo que tienen.
- SUPERVISIÓN Y ANÁLISIS DE LOS EMPLEADOS
Supervisar la actividad de los empleados ya no es la mejor práctica, especialmente en un entorno de trabajo híbrido o remoto, donde la confianza es primordial. Por ello, los líderes deben mostrar los beneficios de la recopilación de datos como una mejor planificación, logística y evaluación, así como a usar los resultados positivos de la supervisión para recompensar los avances.
- MÁS TRANSPARENCIA
La pandemia puso a líderes, gerentes y empleados en un mismo plano, adaptándose a trabajar en un panorama completamente distinto. La emergencia sanitaria hizo que líderes y gerentes de la empresa fueran más visibles, y propició una comunicación clara y transparente.
Ahora, tras la pandemia, los beneficios de esta transparencia podrían perderse, a menos que las empresas sigan compartiendo los planes y objetivos, así como priorizando la comunicación.
- ORGANIZACIONES MÁS COMPLEJAS
Para sobrevivir, las organizaciones aumentaron su potencial al ampliar y dar paso a la cooperación entre empresas. Así, aumentaron las fusiones, adquisiciones y la diversificación geográfica, invirtiendo en nuevos mercados para mitigar y gestionar el riesgo. Son relaciones más complejas, que implican un reto para el futuro para gestionar el rendimiento, la contratación de las competencias necesarias para las nuevas operaciones, y la conexión de las diferentes partes de la organización.
- CENTRARSE EN LOS VALORES Y LA MISIÓN
En el futuro, las organizaciones exitosas serán las que tengan un interés claro en su misión, y que equilibren la salud y el bienestar de su talento con una mejor productividad. Muchos empleados desean trabajar en firmas con un sentido de responsabilidad social y empresarial. En este sentido, los líderes empresariales deben garantizar que su sentido del propósito sea claro, así como reforzar los comportamientos que impulsan su misión.
En conclusión, los cambios en el trabajo ya se están presentando en la actualidad. Así que el futuro del trabajo debe gestarse desde hoy. ¡Prepárate y forma parte de él!
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